lunes, 23 de abril de 2007
respuesta a la mala noticia
viernes, 20 de abril de 2007
Divino Niño (Conozca mas sobre Él...)
Es tal vez la más colombiana de todas de las figuras divinas. Su imagen fue tallada por el artesano Blas Brando, del almacén El Vaticano, de Bogotá, a pedido del sacerdote italiano Juan del Rizzo, quien la diseñó; Esto ocurrió en 1935.
Uno de los atractivos del Divino Niño es su imagen tierna, regordeta y sonrosada, opuesta a las figuras laceradas de la iconografía tradicional religiosa.
Hasta mediados de los años 80, la imagen del Divino Niño era venerada por los habitantes del sur oriente de la ciudad, especialmente del barrio 20 de Julio, donde los padres salesianos habían construido una iglesia en 1942.
Sin embargo, la violencia desatada por el narcotráfico en esa época, el estallido de carros- bombas y la ola de atentados hizo que los bogotanos buscarán, masivamente, refugio espiritual en la imagen del Divino Niño.
A esto se sumaron las imágenes que transmitió la televisión de Andrés Pastrana visitando el templo para agradecerle al Divino Niño haber salido con vida de su secuestro. Desde entonces, este santuario comenzó a extender su influencia a todo el país.
Los domingos pasan por este santuario unos 200 ó 250 mil devotos del Niño Jesús, que asisten a las 28 misas que se celebran, en la nueva basílica y en la plazoleta, de cinco de la mañana a siete de la noche.
Los devotos, generalmente, piden favores cotidianos como un cupo en la escuela, un puesto de trabajo o que el esposo deje de tomar trago. Hasta las empinadas calles del 20 de Julio también llegan habitantes de los sectores más elegantes de Bogotá y, en época de elecciones, políticos con aspiraciones a concejos municipales o a la silla presidencial.
En Bogotá, la imagen del Divino Niño convoca más fieles que cualquier otra representación divina. Es uno de los objetos de fe más venerados y respetados. Imagen que hace parte de uno de los principales aparatos del catolicismo.
Es actualmente utilizado como objeto decorativo-milagroso de la estética popular colombiana.
jueves, 19 de abril de 2007
Ideas tomadas de Andrés Jaque y Carlos Trilnick
El mundo de hoy necesita, exige, soluciones, y entre más pasa el tiempo todo depende de todo, la capa de ozono es afectada por neveras y aerosoles, los microchips necesitan cálculos de vacas para su manufactura, el petróleo es necesario para los carros, pero también para embetunarnos los zapatos, para el plástico que vemos en todos lados y que contamina tanto. Al final, muchas de las cosas del mundo moderno terminan afectando nuestro entorno cultural, social y ecológico. Todo lo que afecta al mundo nos afecta a nosotros y viceversa. Así que todo depende de nosotros y de lo que hagamos con el planeta. Hoy todo pasa por la comunicación, la comunicación a cualquier nivel.
¿Tenemos la capacidad para encontrar soluciones? Si, seguramente, pero según Andrés Jaque, arquitecto español, lo importante ahora no es ir directamente a las soluciones, sino más bien, estudiar el problema, conocerlo, sistematizarlo, porque, según podemos intuir, las soluciones están a la mano, y mas que encontrarlas hay que diseñarlas, además, no son tan lejanas como a veces parecen, entonces, el paso a seguir, una vez conocido el problema, seria exponerlas al público, al debate, darlas a conocer, porque las soluciones para los retos actuales, dependen menos de la acumulación del conocimiento y más de la intuición, de la voluntad de las comunidades y de la aplicación de los diversos conocimientos individuales a un fin común coherente con la realidad de cada una de estas comunidades.
Carlos Trilnick, diseñador argentino, toca un punto muy importante, pues, al parecer se antepone, a lo dicho anteriormente por Jaque, y es el hecho de hacer énfasis en como los noticieros de hoy en día en Latinoamérica, utilizan la música incidental para reforzar el sentimentalismo sobre las ya duras imágenes latinoamericanas. Palabras que se convierten en algo sumamente curioso, porque se podrían interpretar desde la parte del amarillismo, que pretende a través de la música, deformar la imagen, quitarle su valor informativo, y volverla un producto carente de carácter social, pero lleno de espectacularidad, de show.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que la telenovela es el formato rey de Latinoamérica y que su arraigo popular es de suma importancia en el imaginario colectivo de todos nosotros, por lo tanto, en este continente y solo en este continente, la musicalización de una noticia no constituye necesariamente un intento descarado por buscar lágrimas y alejarse de la objetividad, creo más bien que se trata de una sutil mezcla de formatos que apelan a la formación televisiva del pueblo latinoamericano, al sentimentalismo como herramienta comunicativa, al reconocimiento de lo popular como algo valioso, a la unión de distintas áreas emocionales como son la telenovela y las noticia, para entregar un producto, un diseño integrador, incluyente, que en ultimas es lo que une los discursos de Jaque y de Trilnick. Lo que ellos dos hacen es lanzar un anzuelo sin un rumbo fijo, nosotros lo tomamos, buscamos entre todos, como zafarnos, encontramos una solución. Hoy todo depende de todo, se mezcla la ecología, la música, el diseño, el sentimentalismo, la arquitectura, y ninguna prevalece sobre otra.
Conferencia de Omar Rincón
El 18 de abril en el Museo Nacional el conferencista Omar Rincón introduce nuestro Workshop del PEI de una manera brillante: un discurso muy instructivo y a la vez con un sentido del humor muy fino; el tema fue la telenovela.
Nos plantea la importancia de estudiar las telenovelas porque en últimas hablan de nosotros mismos y es hoy en día nuestra industria cultural de exportación. Nos comenta que una telenovela se puede definir en los siguientes términos: “Mujer pura que salva al hombre equivocado” y también cómo esa mujer tiene sólo dos momentos buenos: el primer capítulo en que conoce al hombre y el último capítulo que siempre tiene un final feliz; el resto del tiempo restante (unos 198 capítulos) está sufriendo.
En una telenovela coexisten simultáneamente los siguientes sentimientos: Ambición, Celos, Odio y Amor; siendo este último el más importante. Los Referentes de una telenovela son historias como la de Cenicienta, Romeo y Julieta, El Conde de Montecristo, Los Miserables y Cumbres Borrascosas.
Existen diez reglas básicas en la realización de una telenovela, de las que resalto que es una historia de amor contrariado, el tono es el melodrama, la mujer es pura mientras que al hombre se le permite ser infiel. Se basa en la fragmentación (el televidente entiende el tema de la novela en cualquier capítulo que la empiece a ver, no es necesario haberla visto desde el principio para entenderla); en la Dilación (es la tendencia en demorar las cosas, el televidente por ejemplo espera el beso de los protagonistas y para que esto ocurra tienen que pasar muchos capítulos) y en la Estética de la Repetición (en la repetición hay placer: el placer de lo conocido).
En el ámbito de Colombia, Rincón nos plantea cómo el éxito no se define en tener dinero o educación, sino en tener amor. También el hecho de que toda familia colombiana tiene un secreto guardado, y la familia es la ley. Estas características se reflejan en nuestras telenovelas al igual que otra realidad que consiste en que los protagonistas son “hijos de nadie” y esperan que su padre (al que no conocen) sea un hombre rico que los salve. La solución a los problemas no está en nosotros mismos sino en el afuera, culpamos siempre a los demás. Las mujeres en las telenovelas colombianas son guerreras y luchadoras, mientras que el hombre es criticado, y en términos de Rincón “el hombre al casarse cambia de mamá”.
En oposición a la fórmula de la telenovela nacional que existe en Colombia está la telenovela neutra que son los remakes de telenovelas que fueron exitosas (Ej.: La Tormenta) y los actores deben tener un acento neutro (que se supone es el mejicano). Las locaciones son “no-lugares”: una hacienda, un pueblo; no ocurren en un lugar que sea identificable. En relación al lenguaje no existen los modismos (Ej.: Dicen “Hola amigo” y nunca algo así como “Hola parce”). Las acciones se desarrollan de una manera muy rápida y no existe la dilación de las telenovelas nacionales. En últimas con la fórmula neutra lo que se pretende es no ofender a nadie, pero no han sido exitosas.
Rincón cierra la exposición aconsejándonos hacer una telenovela que se eleve más allá de la burla porque “la burla es un facilismo creativo”.
INTEGRANTES DEL GRUPO
Oriana Fajardo (Directora de Arte y Asistente de direccion)
Isabela Santos (Marketing)
Juan José Castillejo (Guionista y Asistente de dirección)
Julian Duque (Director)
John Jairo Perez (Director de Escenario)
Alejandro Chaparro (Director de Fotografía)
Daniel Rubio (Postproductor)